Hola! Hoy es martes de frutas y verduras... ah como me acuerdo de mis días del super en mi tierra... la verdad debo confesar que me encanta ser esposa y ama de casa.
Bueno, pues como es martes, toca recomendar un libro. Espero seguirme el paso y poder leer muchos libros para recomendarles cada martes, ahorita todavia estoy leyendo el mismo desde hace casi una semana y media porque no es tan fácil de leer. Digo, es fácil, pero no es de los que te echas en una sentada, pero lo bueno es que tengo muchos en mi repertorio que compartirles... y si no es uno recién sacadito del horno será uno de los que ya leí el año pasado no crean que me voy a remontar hasta el pasado para recordar cada libro que he leído, aunque habrá algunos que valgan la pena retomar.
Como dice el título, "Eat, pray, love" de Elizabeth Gilbert es por demás uno de los mejores libros que he leído (porque siento que siempre digo lo mismo, jajaja, será porque me gusta mucho leer) pero este libro me gusta mucho porque es de la vida real. Es su diario personal de su año de viajar por el mundo en busca de paz y felicidad.
Lo gracioso de este libro es que me lo compró mi esposo en uno de sus viajes cuando trabajaba (osea antes de este año de estudios) y lo tuve como por unos 5 meses mas o menos en mi bibliotequita personal, porque debo decirles uno de mis vicios además de comprar cosas de reposteria y cocina es comprar libros y guardarlos, e ir sacando de poco en poco para leer cuando yo quiera (lo malo es que me tuve que deshacer de muchos de estos libros antes de venirme, otros siguen guardados) y finalmente me traje este en el avion a Bruselas pero lo vine leyendo hasta diciembre. Claro, una vez que lo empece a leer ya en forma, lo acabe en una semana...
Quizá no debió ir muy lejos y simplemente pudo buscar a Dios desde su habitación y pedirle una ayuda milagrosa y extraordinaria y Dios lo pudo haber hecho, sin embargo, quizá el propósito de Dios para su vida era que lo encontrara en las cosas más simples de la vida e incluso ella lo comenta al final de su libro. Hace una conclusión mirando al pasado y pudo ver como Dios en su infinita misericordia le permitió esos viajes, conocer esa gente, para un propósito específico. Pero no les quiero arruinar el libro, mejor comprenlo y leanlo. Aunque no es un libro religioso ni una novela, para mi fue un libro muy enriquecedor en lo espiritual porque conociendo a Dios y su palabra, mientras leía algunas de sus experiencias venían a mi mente versículos o enseñanzas bíblicas donde puedes aplicar lo mismito que a ella le pasó. Y como novela, este libro cuenta todas las experiencias tan amenas y graciosas con una voz fresca y ligera que es por demás entretenido.
Espero lo lean pronto.
Con cariño, Marcia
Bueno, pues como es martes, toca recomendar un libro. Espero seguirme el paso y poder leer muchos libros para recomendarles cada martes, ahorita todavia estoy leyendo el mismo desde hace casi una semana y media porque no es tan fácil de leer. Digo, es fácil, pero no es de los que te echas en una sentada, pero lo bueno es que tengo muchos en mi repertorio que compartirles... y si no es uno recién sacadito del horno será uno de los que ya leí el año pasado no crean que me voy a remontar hasta el pasado para recordar cada libro que he leído, aunque habrá algunos que valgan la pena retomar.
Como dice el título, "Eat, pray, love" de Elizabeth Gilbert es por demás uno de los mejores libros que he leído (porque siento que siempre digo lo mismo, jajaja, será porque me gusta mucho leer) pero este libro me gusta mucho porque es de la vida real. Es su diario personal de su año de viajar por el mundo en busca de paz y felicidad.
Lo gracioso de este libro es que me lo compró mi esposo en uno de sus viajes cuando trabajaba (osea antes de este año de estudios) y lo tuve como por unos 5 meses mas o menos en mi bibliotequita personal, porque debo decirles uno de mis vicios además de comprar cosas de reposteria y cocina es comprar libros y guardarlos, e ir sacando de poco en poco para leer cuando yo quiera (lo malo es que me tuve que deshacer de muchos de estos libros antes de venirme, otros siguen guardados) y finalmente me traje este en el avion a Bruselas pero lo vine leyendo hasta diciembre. Claro, una vez que lo empece a leer ya en forma, lo acabe en una semana...
Quizá no debió ir muy lejos y simplemente pudo buscar a Dios desde su habitación y pedirle una ayuda milagrosa y extraordinaria y Dios lo pudo haber hecho, sin embargo, quizá el propósito de Dios para su vida era que lo encontrara en las cosas más simples de la vida e incluso ella lo comenta al final de su libro. Hace una conclusión mirando al pasado y pudo ver como Dios en su infinita misericordia le permitió esos viajes, conocer esa gente, para un propósito específico. Pero no les quiero arruinar el libro, mejor comprenlo y leanlo. Aunque no es un libro religioso ni una novela, para mi fue un libro muy enriquecedor en lo espiritual porque conociendo a Dios y su palabra, mientras leía algunas de sus experiencias venían a mi mente versículos o enseñanzas bíblicas donde puedes aplicar lo mismito que a ella le pasó. Y como novela, este libro cuenta todas las experiencias tan amenas y graciosas con una voz fresca y ligera que es por demás entretenido.
Espero lo lean pronto.
Con cariño, Marcia
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