Es un camino largo que recorrer pero decisión tras decisión podemos ir haciendo una diferencia sin caer tampoco en extremos.
Y bueno, con eso en mente y preocupada por lo que le doy a mi niño (aunque casi todo es natural y hecho en casa) me puse a revisar una de las cosas que si compro: yogurt para bebé.
Se me hizo que el 10% de azúcar en una porción de yogurt es mucho para un niño de 1 año así que decidí no comprarlos más y mejor hacerlo yo.
Y es demasiado fácil lo que hice:
En el procesador de papillas (que nunca usé) puse 1/2 plátano y 2 fresas congeladas. Lo hice puré y luego se lo agregue a 3 cucharadas soperas de yogurt griego natural integrando con un tenedor.
Este yogurt no tiene azúcares, es muy acidito así que para que al enano le guste (porque es fan del 'yogu' como dice) había que endulzarlo.
Pensé que iba a reconocer la diferencia porque no sabía tan dulce como el comprado pero la verdad ni cuenta se dio. Le encantó y más porque lo podía comer sólo en su platito.
Ya también le mezcle manzana (este lo mezcle directo al yogurt y como que se cuajó) y mango (este mi favorito)
Y es algo que incluso como adultos podemos comer porque también los yogurts para adultos traen mucha azúcar añadida. Es mejor algo natural y agregarle frutas y nueces.
Y bueno, he ahí un tip para mejorar nuestra alimentación. :)
Con cariño, Marcia
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