Uno de mis propósitos de año nuevo era escribir un devocional semanal de mis lecturas biblicas y he sido bastante flojita en eso. Tengo que ponerme las pilas y leer más rápido pero ahora trato de leer más a profundidad y a veces me quedo dos dias meditando en una sola cosa que leí, orando un versículo o pasaje, y entendiendo cuál es la voluntad de Dios para mi. Sin embargo, una de las cosas que si quiero hacer es escribir cada vez que vaya leyendo (o Dios me traiga al corazón algún pasaje) sobre los personajes no tan conocidos de la Biblia que llaman mi atención y de los cuáles podemos aprender algo.
Esta semana son las parteras Sifra y Fúa (Exódo 1:15-21). Por si no conocen el contexto bíblico e histórico se los comento muy a mi manera jaja...
Después de morir José quien había sido gobernador de Egipto, después de haber sido vendido por sus hermanos, seducido y traicionado por la esposa de Potifar, metido a la cárcel y olvidado un par de años, pero luego traido a la corte de Faraón para un propósito único. Este José después de encontrarse con sus hermanos nuevamente los había traído a Egipto pues había hambre en toda la tierra. Pasados varios años y como el curso de la naturaleza lo dicta, murió José, sus hermanos y la generación que había conocido lo que José había hecho por Egipto. Fue entonces que el pueblo de Israel estaba multiplicandose extraordinariamente que los egipcios se asustaron y trataron de detenerlos oprimiendolos, pero dice la Biblia que cuanto más los oprimian el pueblo más se multiplicaba y más se fortalecía. Fue entonces que el faraón de la época decidió emitir una terrible y cruel orden: que se matara a todo niño hebreo y se le dejara la vida a todas las nacidas niñas.
Y aqui es donde entran nuestras heroínas: Sifra y Fúa. Ellas recibieron esta órden directamente por parte del rey de Egipto y sin embargo decidieron temer a Dios y no hacer lo que el rey les dijo. Yo pienso que fue una situación estresante para ellas porque quiza podría costarles la vida el obedecer y ellas decidieron obedecer a Dios, poniendo su vida en juego antes que matar a bebés inocentes del pueblo de Dios.
El faraón obviamente las llamó cuando se enteró que seguían naciendo niños y ellas respondieron que las mujeres hebreas eran fuertes y daban a luz solas. Y por esto que ellas hicieron Dios las bendijo a ellas y sus familias. La Biblia dice que Dios las prosperó. Y gracias a esto el pueblo siguio fortaleciendose y multiplicandose en gran manera.
La historia ahi no termina pero no es parte de lo que hoy queria señalar.
La reflexión de hoy es ¿cuántas pondriamos en juego nuestras vidas por obedecer a Dios? A lo mejor no peligra tu vida física pero si tu vida social, escolar, personal, familiar, etc... Me pongo a pensar en cuántas veces enfrentamos decisiones que nos pueden dejar "solos" por obedecer a Dios y quiza haya alguien que prefiera hacer lo que el mundo dice que lo que Dios dice. Yo me acuerdo de experiencias que vivi en la secundaria y en la carrera donde tuve que hacer frente a situaciones dificiles que en secundaria me costaron unas "amigas" (porque eventualmente supe que no eran buenas compañias) y en carrera pudieron haberme costado una calificación o afecto por el maestro por levantar la voz y marcar una equivocación de la maestra en un estudio de las religiones. Y en ambos casos Dios me bendijo en su momento con otras amigas, madurez, respeto de la maestra y eventualmente permitir que muchos estudiantes escucharan el mensaje de Cristo al menos una vez en sus vidas y al final de mi carrera profesional graduarme con honores.
Dios es bueno, el nos pone solo las pruebas que podemos pasar. A veces no las vamos a pasar porque seguimos siendo necios, pero yo creo que después de pasar por varias transformaciones en sus manos, cada prueba que venga será más llevadera de su mano. Yo pienso ahora, conociendo y meditando en la historia de estas dos mujeres, que si ellas pudieron enfrentar una situación extremadamente dificil en un tiempo historico pesado con una carga espiritual fuerte y aun asi confiar en Dios y enfrentar la autoridad... yo también puedo decidir obedecer a Dios en cualquier cosa grande o chica que vaya viviendo.
¿Te animas a ser valiente como ellas?
con cariño, Marcia
Esta semana son las parteras Sifra y Fúa (Exódo 1:15-21). Por si no conocen el contexto bíblico e histórico se los comento muy a mi manera jaja...
Después de morir José quien había sido gobernador de Egipto, después de haber sido vendido por sus hermanos, seducido y traicionado por la esposa de Potifar, metido a la cárcel y olvidado un par de años, pero luego traido a la corte de Faraón para un propósito único. Este José después de encontrarse con sus hermanos nuevamente los había traído a Egipto pues había hambre en toda la tierra. Pasados varios años y como el curso de la naturaleza lo dicta, murió José, sus hermanos y la generación que había conocido lo que José había hecho por Egipto. Fue entonces que el pueblo de Israel estaba multiplicandose extraordinariamente que los egipcios se asustaron y trataron de detenerlos oprimiendolos, pero dice la Biblia que cuanto más los oprimian el pueblo más se multiplicaba y más se fortalecía. Fue entonces que el faraón de la época decidió emitir una terrible y cruel orden: que se matara a todo niño hebreo y se le dejara la vida a todas las nacidas niñas.
Y aqui es donde entran nuestras heroínas: Sifra y Fúa. Ellas recibieron esta órden directamente por parte del rey de Egipto y sin embargo decidieron temer a Dios y no hacer lo que el rey les dijo. Yo pienso que fue una situación estresante para ellas porque quiza podría costarles la vida el obedecer y ellas decidieron obedecer a Dios, poniendo su vida en juego antes que matar a bebés inocentes del pueblo de Dios.
El faraón obviamente las llamó cuando se enteró que seguían naciendo niños y ellas respondieron que las mujeres hebreas eran fuertes y daban a luz solas. Y por esto que ellas hicieron Dios las bendijo a ellas y sus familias. La Biblia dice que Dios las prosperó. Y gracias a esto el pueblo siguio fortaleciendose y multiplicandose en gran manera.
La historia ahi no termina pero no es parte de lo que hoy queria señalar.
La reflexión de hoy es ¿cuántas pondriamos en juego nuestras vidas por obedecer a Dios? A lo mejor no peligra tu vida física pero si tu vida social, escolar, personal, familiar, etc... Me pongo a pensar en cuántas veces enfrentamos decisiones que nos pueden dejar "solos" por obedecer a Dios y quiza haya alguien que prefiera hacer lo que el mundo dice que lo que Dios dice. Yo me acuerdo de experiencias que vivi en la secundaria y en la carrera donde tuve que hacer frente a situaciones dificiles que en secundaria me costaron unas "amigas" (porque eventualmente supe que no eran buenas compañias) y en carrera pudieron haberme costado una calificación o afecto por el maestro por levantar la voz y marcar una equivocación de la maestra en un estudio de las religiones. Y en ambos casos Dios me bendijo en su momento con otras amigas, madurez, respeto de la maestra y eventualmente permitir que muchos estudiantes escucharan el mensaje de Cristo al menos una vez en sus vidas y al final de mi carrera profesional graduarme con honores.
Dios es bueno, el nos pone solo las pruebas que podemos pasar. A veces no las vamos a pasar porque seguimos siendo necios, pero yo creo que después de pasar por varias transformaciones en sus manos, cada prueba que venga será más llevadera de su mano. Yo pienso ahora, conociendo y meditando en la historia de estas dos mujeres, que si ellas pudieron enfrentar una situación extremadamente dificil en un tiempo historico pesado con una carga espiritual fuerte y aun asi confiar en Dios y enfrentar la autoridad... yo también puedo decidir obedecer a Dios en cualquier cosa grande o chica que vaya viviendo.
¿Te animas a ser valiente como ellas?
con cariño, Marcia
Hola Marcia, me encanta la manera en que relatas los textos biblícos, si me das tu autorización, me gustaría postear los devocionales (claro, mencionando tu autoría) en mi face...
ResponderEliminar... Dios te siga bendiciendo!!
Claro Alma! Dios te bendiga!
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