Hola amigos!
La verdad es que no he escrito por muchas razones, la principal que he andado ocupada de socialito y buscando cosas para mi nuevo hogar ya que en menos de un mes, mi lugar de residencia será Holanda. Estamos felices, es algo que ni en mis más remotos sueños hubiera imaginado y estoy feliz y emocionada de ver que me depara Dios en este nuevo lugar.
Esto me ha hecho pensar en muchas cosas y es parte del que no he estado escribiendo también. Dios está poniendo todas las cosas en su lugar y aunque me preocupa un poco el que haré en mi nueva ciudad yo sé que Dios tiene planes buenos para mi asi que solo tengo que preparar mis cartas y confiar en él y él hará el resto.
Esto me ha llevado a pensar en muchas cosas de mi persona, de mi vida, de mis emociones. El vivir acá y todo este año de haberme alejado tanto de gente buena como de gente mala de Monterrey me ha cambiado y me ha dado tiempo de valorarme y verme desde otro punto de vista. Cosas que pensaba que habia en mi o que yo tenia de malo, resulto que no eran ciertas y cosas que no pensaba de mi, resultaron ciertas. He madurado, y no sé si estoy lista honestamente para regresar a Monterrey. No sé que me espera cuando llegue por 3 semanas de vacaciones. Tengo "miedo" de ver a ciertas personas o de encontrarme en determinadas situaciones y eso a su vez me hace meditar más y más respecto a que pasa conmigo.
En resumen, al salir todos estos temores, dudas, preocupaciones y de más lo mejor que puedo hacer es ponerlas en manos de Dios. Le pido que tome control de mis emociones, sentimientos, preocupaciones, que examine mi corazón e incluso le pido perdón por muchas cosas que sé que él no quiere para mi y que yo no dejo ir. Pero estoy aprendiendo a dejar ir, creo que Dios se divierte conmigo en el sentido de que ha de decir "Ay hijita, mira, tu te aferras a esto o aquello o lloras por esto o lo otro y no ves que te lo quiero quitar porque tengo esto otro mejor para ti" y luego de hacer mi berrinche y de más incluso en presencia de Dios, le digo "Aqui esta Padre, me duele pero tomalo" y el me responde "Ya vez, te dije" y con una sonrisa me consuela y me anima a seguir en el camino. Me levanta, me sacude el polvo, besa mis heriditas y me empuja hacia el camino.
Ha sido un año de muchos tropezones, y lo peor es que yo soy una juez muy dura conmigo misma. Me critico muy fuertemente, me deprimo, me siento culpable, aclaro mi pensamiento, veo mis pros y mis contras y luego ya estoy lista para el siguiente encuentro. Pero de eso se trata la vida. El caminar con DIos no es un camino fácil, pero es el mejor. Muchas veces caeremos, pero vencedores son aquellos que después de caerse se levantan y siguen. Vencedores son aquellos que lo intentan mil veces y una más para lograr lo que quieren. Cada vez que pienso en estas cosas me acuerdo de mi nombre. Berenice significa "que trae la victoria" y entonces pienso. Desde mi nacimiento Dios me llamó a ser una Guerrera Victoriosa (eso significa Marcia Berenice) y los guerreros no son gente apachurrona ni cabizbaja, son gente de caracter fuerte, personalidad definida, lideres, emprendedores y dispuestos a los golpes. Eso me acabo de dar cuenta la semana pasada. Soy una guerrera fresa, eso si, porque lloro y lloro pero sigo luchando.
Sin embargo, sé que este nuevo periodo de mi vida, en Holanda estará lleno de nuevas pruebas y sé que Dios quiere que recuerde siempre como este año el nos bendijo en todo con mano firme y poderosa para que sepa que lo que tengo y lo que soy no es por mi misma sino por él y por eso sé que ahora viene un periodo de paz en mi vida, de bendiciones por caer del cielo y estoy lista para ello.
Esto y muchas otras cosas más han ocupado mi mente estos dias. Por lo pronto, hoy sigo de socialito mayor y ya me tengo que ir alistando para ver a mi amiga Els y tomarnos un cafe. =)
con cariño, Marcia
La verdad es que no he escrito por muchas razones, la principal que he andado ocupada de socialito y buscando cosas para mi nuevo hogar ya que en menos de un mes, mi lugar de residencia será Holanda. Estamos felices, es algo que ni en mis más remotos sueños hubiera imaginado y estoy feliz y emocionada de ver que me depara Dios en este nuevo lugar.
Esto me ha hecho pensar en muchas cosas y es parte del que no he estado escribiendo también. Dios está poniendo todas las cosas en su lugar y aunque me preocupa un poco el que haré en mi nueva ciudad yo sé que Dios tiene planes buenos para mi asi que solo tengo que preparar mis cartas y confiar en él y él hará el resto.
Esto me ha llevado a pensar en muchas cosas de mi persona, de mi vida, de mis emociones. El vivir acá y todo este año de haberme alejado tanto de gente buena como de gente mala de Monterrey me ha cambiado y me ha dado tiempo de valorarme y verme desde otro punto de vista. Cosas que pensaba que habia en mi o que yo tenia de malo, resulto que no eran ciertas y cosas que no pensaba de mi, resultaron ciertas. He madurado, y no sé si estoy lista honestamente para regresar a Monterrey. No sé que me espera cuando llegue por 3 semanas de vacaciones. Tengo "miedo" de ver a ciertas personas o de encontrarme en determinadas situaciones y eso a su vez me hace meditar más y más respecto a que pasa conmigo.
En resumen, al salir todos estos temores, dudas, preocupaciones y de más lo mejor que puedo hacer es ponerlas en manos de Dios. Le pido que tome control de mis emociones, sentimientos, preocupaciones, que examine mi corazón e incluso le pido perdón por muchas cosas que sé que él no quiere para mi y que yo no dejo ir. Pero estoy aprendiendo a dejar ir, creo que Dios se divierte conmigo en el sentido de que ha de decir "Ay hijita, mira, tu te aferras a esto o aquello o lloras por esto o lo otro y no ves que te lo quiero quitar porque tengo esto otro mejor para ti" y luego de hacer mi berrinche y de más incluso en presencia de Dios, le digo "Aqui esta Padre, me duele pero tomalo" y el me responde "Ya vez, te dije" y con una sonrisa me consuela y me anima a seguir en el camino. Me levanta, me sacude el polvo, besa mis heriditas y me empuja hacia el camino.
Ha sido un año de muchos tropezones, y lo peor es que yo soy una juez muy dura conmigo misma. Me critico muy fuertemente, me deprimo, me siento culpable, aclaro mi pensamiento, veo mis pros y mis contras y luego ya estoy lista para el siguiente encuentro. Pero de eso se trata la vida. El caminar con DIos no es un camino fácil, pero es el mejor. Muchas veces caeremos, pero vencedores son aquellos que después de caerse se levantan y siguen. Vencedores son aquellos que lo intentan mil veces y una más para lograr lo que quieren. Cada vez que pienso en estas cosas me acuerdo de mi nombre. Berenice significa "que trae la victoria" y entonces pienso. Desde mi nacimiento Dios me llamó a ser una Guerrera Victoriosa (eso significa Marcia Berenice) y los guerreros no son gente apachurrona ni cabizbaja, son gente de caracter fuerte, personalidad definida, lideres, emprendedores y dispuestos a los golpes. Eso me acabo de dar cuenta la semana pasada. Soy una guerrera fresa, eso si, porque lloro y lloro pero sigo luchando.
Sin embargo, sé que este nuevo periodo de mi vida, en Holanda estará lleno de nuevas pruebas y sé que Dios quiere que recuerde siempre como este año el nos bendijo en todo con mano firme y poderosa para que sepa que lo que tengo y lo que soy no es por mi misma sino por él y por eso sé que ahora viene un periodo de paz en mi vida, de bendiciones por caer del cielo y estoy lista para ello.
Esto y muchas otras cosas más han ocupado mi mente estos dias. Por lo pronto, hoy sigo de socialito mayor y ya me tengo que ir alistando para ver a mi amiga Els y tomarnos un cafe. =)
con cariño, Marcia
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